lunes, 13 de octubre de 2014

Apocalipsis contagiosa

Hola, como siempre esta no es más que mi humilde opinión y ya que este tema de mucho de que hablar, yo también quería aportar mi granito de arena. Estoy hablando, naturalmente del Ébola y la controversia que ha causado.
Sinceramente, creo que se está estrapolando mucho todo este tema. Sí, ya se que es un virus mortal y muy contagioso, pero lo ha sido desde que se descubrió en 1976 y nunca ha habido tanta movilización como hasta ahora. Esta enfermedad ha matado a miles de personas desde entonces, y casi no se ha mencionado en ningún medio de comunicación, ni siquiera en Internet.
El brote de ébola en África Occidental es una epidemia que comenzó en Guinea y se extendió a Liberia, Sierra Leona, Nigeria, Senegal, hasta que llegó a Europa y Estados Unidos. Esta pandemia comenzó ha hacerse notar en el continente africano sobre el mes de agosto de este año y en los medios de comunicación sólo unas pocas líneas mencionaban la situación de los afectados por el virus, y en Internet casí ni existía este tema tan lejano a nuestra "civilización". Hasta que esta famosa enfermedad llegó a nuestras puertas ya habían muerto miles de personas en África y apenas se mencionó en las redes sociales o en los medios de comunicación convencionales.



Pero resulta que un misionero español, Manuel García Viejo, contrae el virus y las autoridades sanitarias de este país deciden traerle a España para tratarle (cosa completamente irresponsable, ya que en España no existen ningún centro especializado en tratar y controlar este virus, considerado uno de los más peligrosos). Entonces estalla. Las redes sociales no paran de comentar y criticar las acciones del Gobierno, que sinceramente han sido impriudentes y estupidas. Se vuelve "Trending Topic" en cuanto se sabe que la auxiliar de enfermera, una de las personas que trataban al religioso, se ha contagiado. El Ébola ya no existe en África, ¡Está entre nosotros! Que más da si mueren 3000 personas en África, ¡Aquí hay dos infectados! Al final, el misionero acaba muriendo y ponen en cuarentena a Teresa Romero, a su marido y al perro de la pareja.
Al final sacrifican al animal, por miedo a que pueda tener el virus. Entonces se arma un bullicio enorme en las redes sociales; lo que no se dijo por los africanos contagiados y enfermos se dijo por el perro (ojo, que yo estaba en contra de la decisión de sacrificarlo, que podrían haberle puesto en cuarentena y hacerle pruebas sin necesidad de matarlo).


Que mueren miles de personas en África, bueno que le vamos ha hacer, la vida es dura. Que sacrifican a un animal por miedo al contagio, no por dios, que asesinos, hagamos manifestaciones y movilizaciones para pedir que se mantenga con vida al pobre animal.
Por cierto, no tengo constancia de ninguna manifestación multitudinaria donde se denuncie el sacrificio diario de miles de canes en las perreras españolas, parece que estos animales, iguan que los africanos, son un cero a la izquierda en la "Agenda Setting" personal de cada ciudadano de este país.



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